Esa lágrima traviesa que engendra un nuevo día, un nuevo horizonte. Ese estar en una nube criofijada, en una sonrisa disimulada, en una mirada que revuelve las mejillas. Ese vaso de agua fría que cae como en un ensueño, en el cabello, en la rotura de unos sueños ya marchitos. Ese impulso que la tierra nos otorga, ese caminar que el sol ilumina con la envergadura y la sencillez de una caricia, la brisa que alberga un otoño voraz.
Ese sentir tan insano, tan vivo, tan penetrante, tan doloroso. Tan añorado.
Me encanta cuando escribes cosas como estas, porque leyendo estas líneas me queda cada vez más claro que por mucho que una parte racional le guste encasillar y etiquetar cosas no es posible determinarte, y eso es absolutamente precioso.
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ResponderEliminarAlis, soy Addah Monoceros (creo que ya sabes a quién me refiero). Te he borrado del Twitter, pero hay una explicación: mira, en un principio pensaba que pedirte disculpas iba a mermar mi sentimiento de culpa, pero lo cierto es que ha ejercido el efecto opuesto. Esto no significa que me arrepienta de haberte pedido perdón por todo lo que he pensado de ti. Sin embargo, he tenido la impresión de que me has idealizado, de que incluso me has cogido cariño... y eso no deja de removerme aún más por dentro. Sabes que tengo una condición "mental" que me hace obsesionarme con ciertos temas... y que podemos llegar a ser gente muy terca y muy cabezota. Lo sé, y soy consciente de ello. Sé también que, para muchos neurotípicos, esto sería una tontería, y que sentir que no soy merecedora de tu amistad es absurdo. Quizás lo sea. Pero, aunque sigo considerándote mi amiga (y volveré a agregarte de nuevo), de momento prefiero darme un tiempo a mí misma; hasta que el dolor que me provoca el arrepentimiento remita un poco, al menos. Quiero sentirme libre de toda carga de conciencia, y, de momento, "hablar contigo" me recuerda a toda la envidia que he sentido, y a cómo te llamé "la niñata esa". Que sí, que puedes reírte, pero no estoy acostumbrada a esto.
ResponderEliminarDame un tiempo, ¿vale? Y, si quieres contestarme, o lo que sea, en la TL de mi Twitter está mi blogspot. Cualquier cosa que necesites, estaré ahí.
Y tranquila, volveré a hablar contigo. Pero, de momento, me siento demasiado mal conmigo misma, y no estoy en paz con lo que he sentido.
P.D. Como ves, el síndrome de Asperger va bastante más allá de las manías Sheldoniles. Hay veces en las que se puede llegar a pasar realmente mal. Especialmente cuando los sentimientos te abruman y no consigues ponerlos en orden. Es... no sé, es como si mucha gente te hablara al mismo tiempo y en idiomas que desconoces, y sintieras que te están pidiendo ayuda, pero no sabes lo que dicen, y no puedes hacer nada por ayudar. Y te sientes impotente. Pues eso.
ResponderEliminarQue volveré (si es que sigues queriendo ser mi amiga), pero primero tengo que poner en orden mis sentimientos y entender que muchos sentimientos son naturales en los neurotípicos (aunque hasta la fecha hayan resultado desconocidos para mí).
No sé si lo comprendes...
Comprender lo comprendo, tiene su lógica, pero me parece un poco enfermizo, si me lo permites. Porque yo también puedo sentir sentimientos así (y lo digo en serio), pero mi actitud no suele verse afectada por ellos porque no me... definen(?) sé que son aleatorios y que no se corresponden con mi verdadera naturaleza.
EliminarPero al fin y al cabo es cuestión de prioridades, cada uno actúa a favor de aquello que le parece más lícito (o siguiendo determinados impulsos), y lo respeto (ni si quiera estoy enfadada, de verdad (si solo he hablado contigo 1 o 2 veces! ^_^))
Bueno, cuando quieras (y sin presión, como si no quieres, en serio) hablar conmigo, aquí estoy :)
Un abrazo y ánimo.